El Getafe B se ha reencontrado con la victoria como local más de dos meses después, tras vencer por 4-0 al Villaverde Boetticher en la Ciudad Deportiva. El fuerte viento de este domingo a mediodía en Getafe marcaba un partido que durante su primer tiempo por momentos parecía no estar disputándose en absoluto, con continuos pelotazos que mutaban a saque de banda para el rival, pases que seguramente salían con un destino claro pero se acababan perdiendo por el camino, y frustrantes parones cada vez que los porteros tenían que servir de meta, ya que ni Agustín ni David Gil eran capaces de mantener el balón quieto para realizar un saque medianamente reglamentario. Lucha, balones largos, y poco trabajo para unos guardametas que vivieron una mitad la mar de tranquila, prácticamente ajenos a un ida y vuelta algo caótico.