Hay delantero apalabrado... pero Kike Sola no quiere salir

Al mercado de invierno aún le resta la frenética recta final de cada ventana de fichajes, y el Getafe tiene pendiente finiquitar las entradas y salidas para poder pasar a concentrarse en el reto del ascenso en esta la segunda vuelta de liga. Bordalás no participó en la confección de la plantilla, y ahora que trabaja de cerca con Toni Muñoz y el presidente Ángel Torres, vive atento a esas posibles incorporaciones que se ajusten más a su filosofía. Además de las llegadas de Sergio Mora y Carlos Peña, hombres propuestos por el propio Bordalás, el míster azulón espera que algún nombre más refuerce el vestuario en estos últimos días de mercado: "Se está trabajando en ello, a ver si en los próximos días hay alguna novedad, siempre que pueda llegar alguien que nos ayude y nos mejore. Es necesario, hay puestos que necesitamos alguna mejora".

Kike Sola llegaba al Getafe en el último día del mercado estival. Foto: Getafe CF

El único problema para poder dar carpetazo al asunto de los refuerzos es que, primero, han de llegar las salidas. Con la plantilla casi completa, la entidad que preside Ángel Torres ha de hacer hueco a las caras nuevas deshaciéndose de los futbolistas que menos cuentan para el cuerpo técnico, y que, exceptuando la marcha de Kadir al Alcorcón, aún no han hecho amago de abandonar el club. Uno de los jugadores que está en todas las quinielas para dejar Getafe este mes de enero es el punta Kike Sola, sin sitio en los esquemas de Bordalás, y que pasaría a ser el cuarto delantero en caso de que el club consiguiera reforzarse con otro jugador atacante de un perfil diferente a Sola, Molina y Stefan, objetivo principal ahora mismo en las oficinas de la Avenida Teresa de Calcuta.

Sin embargo, y tal y como el mandamás azulón ha desvelado a Onda Cero, Kike Sola está a gusto en Getafe y en principio no se plantea salir, bloqueando por el momento un cambio de cromos que parecía destinado a producirse. Es más, Torres ha deslizado que tiene apalabrada la llegada de ese deseado delantero (un futbolista nacional), pero que mientras no se produzca ninguna salida, es una operación que no puede firmarse. A once días del cierre de mercado, el 'dejen salir antes de entrar' está más vigente que nunca.